Wired publicó recientemente un artículo acerca de NIO, una compañía china dedicada a la fabricación de autos eléctricos. La idea propuesta por la compañía radica en utilizar baterías pre-cargadas para reemplazarlas por baterías sin energía en una estación que asista a los vehículos eléctricos. Esto permite optimizar el tiempo de recarga de los autos, incluso más que el tiempo necesario para recargar un tanque convencional de combustible. Si comparamos el tiempo de recarga que tomaría a través del uso de corriente, que oscila entre 30 minutos a 8 horas, el cambio de baterías lo haría en menos de 1 minuto.
Otro aspecto importante es que el mercado chino representa en la actualidad uno de los países con mayores ventas de autos eléctricos. En un mercado de la escala del chino, el interés por invertir en esta iniciativa crece, por lo que continuar con la investigación y desarrollo de los autos y las baterías sería más viable. Implementar el cambio de baterías eléctricas en el mercado permitiría el nacimiento de un ecosistema de energías renovables de bajo costo y gran conveniencia. Las baterías se podrían cargar cuando y donde la electricidad es barata y la demanda baja.
En el caso peruano, un factor limitante para el uso de vehículos eléctricos es la construcción de nuevas electrolineras, las cuales demandan una gran inversión y altos costos de mantenimiento al ser una propuesta nueva con alta demanda eléctrica. Sin embargo, hay iniciativas para empezar a utilizar vehículos eléctricos como buses y scooters eléctricos en Perú.
El ritmo de adopción de vehículos eléctricos se podría disparar si es que el modelo de cambio de baterías se logrará popularizar. Reduciría el costo y el tiempo de recarga. Esta es, sin lugar a dudas, una iniciativa positiva que va construyendo el futuro de la industria automotriz.
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Wired publicó recientemente un artículo acerca de NIO, una compañía china dedicada a la fabricación de autos eléctricos. La idea propuesta por la compañía radica en utilizar baterías pre-cargadas para reemplazarlas por baterías sin energía en una estación que asista a los vehículos eléctricos. Esto permite optimizar el tiempo de recarga de los autos, incluso más que el tiempo necesario para recargar un tanque convencional de combustible. Si comparamos el tiempo de recarga que tomaría a través del uso de corriente, que oscila entre 30 minutos a 8 horas, el cambio de baterías lo haría en menos de 1 minuto.
Otro aspecto importante es que el mercado chino representa en la actualidad uno de los países con mayores ventas de autos eléctricos. En un mercado de la escala del chino, el interés por invertir en esta iniciativa crece, por lo que continuar con la investigación y desarrollo de los autos y las baterías sería más viable. Implementar el cambio de baterías eléctricas en el mercado permitiría el nacimiento de un ecosistema de energías renovables de bajo costo y gran conveniencia. Las baterías se podrían cargar cuando y donde la electricidad es barata y la demanda baja.
En el caso peruano, un factor limitante para el uso de vehículos eléctricos es la construcción de nuevas electrolineras, las cuales demandan una gran inversión y altos costos de mantenimiento al ser una propuesta nueva con alta demanda eléctrica. Sin embargo, hay iniciativas para empezar a utilizar vehículos eléctricos como buses y scooters eléctricos en Perú.
El ritmo de adopción de vehículos eléctricos se podría disparar si es que el modelo de cambio de baterías se logrará popularizar. Reduciría el costo y el tiempo de recarga. Esta es, sin lugar a dudas, una iniciativa positiva que va construyendo el futuro de la industria automotriz.
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